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La vida después del tratamiento del cáncer

Mujer flexionando el músculo del brazo mientras se toma una selfie.

Las personas que han completado un tratamiento a menudo dicen que, aunque se sintieron aliviadas cuando terminó, tuvieron que adaptarse a nuevas formas de ver su vida.

Fuente: iStock

Es común que las personas digan que sintieron alivio al terminar el tratamiento, pero que la transición a una nueva forma de vivir después del cáncer les resultó difícil. Es como entrar a otro mundo donde se tuvieron que adaptar a nuevas emociones, cambios en la ayuda que recibían y a ver la vida de otra manera.

Algunos sobrevivientes de cáncer, incluso después de terminar el tratamiento, siguen con problemas físicos o emocionales. A veces se deben hacer pruebas y revisiones minuciosas para asegurarse de que el cáncer no esté volviendo.

Afrontar una nueva normalidad después del cáncer

Acostumbrarse a la vida después del tratamiento del cáncer lleva tiempo. Hay quienes se sienten un poco perdidos, sin saber qué hacer después. Quizás sienta que es una montaña rusa de emociones causadas por el cáncer. Tal vez sienta alivio, pero también ansiedad y preocupación. Algunas personas se sienten tristes o incluso deprimidas. Recuperarse del tratamiento lleva tiempo.

Además, es difícil cuando otras personas piensan que ya está listo para seguir adelante cuando no lo está. Es posible que todavía pase por alguna de las siguientes situaciones:

  • Siente cansancio y no quiere hacer demasiadas cosas.
  • Aún se está curando del tratamiento y los efectos secundarios.
  • Está nervioso porque verá al oncólogo menos seguido.
  • No está seguro cómo seguir adelante.
  • Siente ansiedad por el futuro.
  • Está preocupado de que el cáncer vuelva.

Una de las cosas más difíciles después del tratamiento es no saber qué sucederá después. Quienes pasaron por el tratamiento del cáncer describen los primeros meses como un momento de cambio. Algunos piensan que es un momento de adaptación a la “nueva normalidad”. No es tanto volver "a la normalidad" sino de averiguar qué será "normal" para usted ahora. Las personas a menudo dicen que la vida cobra un nuevo significado o que ven las cosas de un modo diferente.

Su nueva normalidad quizás incluya lo siguiente:

  • Planes o metas diferentes que son distintos a los que tenía antes del cáncer
  • Cambios en la alimentación
  • Apoyo nuevo o diferente
  • Cicatrices permanentes en el cuerpo
  • Dificultad para hacer cosas que antes eran más fáciles
  • Rutinas diferentes que antes no tenía
  • Cicatrices emocionales por la experiencia vivida
  • Preocupaciones sobre su imagen corporal o sexualidad

Quizás se vea de una manera nueva o note que otra gente no lo trata igual que antes. Pase lo que pase, dese tiempo para adaptarse a los cambios. Tómeselo un día a la vez.

Hacer frente al miedo de que el cáncer vuelva

Aunque terminar el tratamiento del cáncer da felicidad y alivio, a veces produce miedo y ansiedad. Es probable que el miedo más común sea que el cáncer recidive (vuelva).

Este miedo es una causa importante de angustia para muchas de las personas que recibieron tratamiento del cáncer. Hacerse pruebas de imágenes u otras pruebas médicas de seguimiento les da mucha ansiedad. Algunos sobrevivientes de cáncer llaman a este sentimiento “scanxiety” en inglés.

El miedo a la recidiva es normal y disminuye con el tiempo. Sin embargo, incluso años después del tratamiento, hay situaciones que podrían causarle preocupación. Por ejemplo, las consultas de seguimiento, los exámenes de detección, ciertos síntomas, la enfermedad de un ser querido o el aniversario del diagnóstico.

A continuación se incluyen algunas ideas que podrían ayudarle a sobrellevar sus miedos.

  • Hable con el equipo de atención médica sobre las cosas que le preocupan. Cuénteles sobre el miedo a que el cáncer vuelva para que respondan a sus preocupaciones. El riesgo de recidiva es diferente para cada paciente. El equipo de atención médica le informará sobre el tipo de cáncer que tuvo y la probabilidad de recidiva. Le darán la confianza de saber que están pendientes de usted.
  • Es común que los sobrevivientes de cáncer se asusten cuando tienen dolores o molestias. Pregunte cuánto duran los efectos secundarios. Avise si le preocupa algún síntoma. Pida consejo para saber si necesita programar una cita. Solo conversar con ellos sobre sus síntomas le ayudará a calmar sus miedos. Además, con el tiempo, quizás reconozca que ciertas sensaciones en el cuerpo pasarán a ser normales.
  • Anote cualquier síntoma que tenga. Use un diario o cuaderno para anotar los síntomas y efectos secundarios a medida que se aparecen. Anote también cualquier problema relacionado con sus emociones. Antes de las consultas de seguimiento, escriba las preguntas que quiera hacerle al equipo de atención médica. Esté listo para contarles lo que haya pasado desde la última revisión o conversación.
  • Pida un plan de atención de seguimiento. Un plan de atención de seguimiento es un resumen del tratamiento del cáncer con los próximos pasos para su atención. Tener un plan le dará una sensación de control sobre su salud después del tratamiento. Para informarse sobre este plan y tomar parte activa en el cuidado de su salud y la atención del cáncer, consulte Atención médica de seguimiento.
  • Hable con un consejero. Si está abrumado y necesita ayuda para lidiar con sus temores, pida una consulta con un especialista. Es posible que un consejero o terapeuta le ayude a abordar la ansiedad y las preocupaciones. Estos profesionales también podrán decirle si sería adecuado tomar un medicamento en su caso. Los grupos de apoyo en Internet o en persona también podrían ser útiles.
  • Manténgase ocupado mientras espera los resultados de las pruebas. Programe actividades con amigos o familiares, o llame a personas con las que hace mucho no habla. También podría dedicar tiempo a cuidarse a sí mismo: ejercicio, meditación, masaje, manicura o actividades que lo distraigan de la espera. 
  • Sepa cuáles son los servicios disponibles. Infórmese sobre los servicios que se ofrecen en el hospital y la comunidad. Muchos de los recursos y personas que estuvieron a su disposición durante el tratamiento lo siguen estando. 
  • Concéntrese en lo que puede controlar. Algunas personas dicen que organizarse y tener planes las ayuda a sentir más control en su vida. Seguir participando en su atención médica, hacer preguntas, ir a las consultas y cambiar su estilo de vida son algunas de las cosas que puede controlar. Organizar un calendario de actividades diarias le podría dar una sensación de control.

Aunque es imposible controlar cada cosa que piensa, hay personas que tratan de no pensar tanto en los miedos y hacen lo posible para disfrutar los buenos momentos de la vida. Siempre que pueda, use su energía para concentrarse en lo que le hace sentir bien y las cosas que puede hacer para mantenerse lo más sano posible.

Cuide la mente y el cuerpo

Use la energía para enfocarse en su bienestar y controlar el estrés. Las siguientes son algunas formas de cuidar la mente y el cuerpo.

  • Busque formas de relajarse. Se ha comprobado que los ejercicios de relajación ayudan a las personas con el estrés. Es posible que lo ayuden a relajarse cuando esté preocupado. La meditación y el yoga también alivian el estrés. Consulte Cómo relajar la mente y el cuerpo.
  • Converse. Cuénteles a sus amigos y familiares cómo se siente. Es probable que sirva para sentirse mejor y darse cuenta de que no está solo.
  • Únase a un grupo de apoyo de personas en la misma situación. Algunas personas dicen que hablar con otros sobrevivientes de cáncer con el mismo tipo de cáncer las ayudó a sobrellevar el estrés. Hable con el trabajador social del hospital para informarse sobre los grupos locales. Haga una búsqueda en Internet para encontrar grupos en su zona o grupos virtuales. Para obtener más consejos, consulte Grupos de apoyo para el cáncer.
  • Haga ejercicio. El ejercicio moderado (por ejemplo, caminar, andar en bicicleta, nadar) ayuda a disminuir la ansiedad y la depresión. Quizás ayude a mejorar su estado de ánimo.
  • Coma alimentos saludables. Hable con un dietistanutricionista sobre los alimentos que debe comer para mantenerse sano y fuerte.
  • Anote lo que siente. Escribir en un diario o en un cuaderno lo puede ayudar a expresar sus sentimientos. Muchas personas dicen que ponerlos por escrito ayuda a alejar las preocupaciones y los miedos.
  • Busque consuelo en la espiritualidad. Muchos sobrevivientes hallan fortaleza en su fe, religión o sentido de espiritualidad.
  • Devuelva a la comunidad. Algunas personas canalizan su energía mediante el trabajo voluntario y ayudan a otros. Sentirse productivos les da un propósito y les permite dedicar la atención a los demás. Si desea apoyar una causa relacionada con el cáncer, consulte el folleto en inglés del NCI Facing Forward: Making a Difference.
  • Participe en clubes, clases o reuniones sociales. Estar con otras personas le ayudará a concentrarse en algo que no sea el cáncer y las preocupaciones relacionadas.