Se autorizó una prueba de sangre para evaluar el riesgo de cánceres hereditarios
, por Edward Winstead
La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) otorgó la autorización de comercialización para una prueba de sangre que detecta cambios genéticos hereditarios que aumentan el riesgo de presentar algunos tipos de cáncer. El 29 de septiembre, la FDA anunció que es la primera prueba de esta clase en recibir autorización de comercialización.
La prueba, llamada Common Hereditary Cancers Panel, que fabrica Invitae, analiza la muestra de sangre de una persona para detectar cambios en 47 genes vinculados con formas hereditarias de cáncer. La FDA describió la prueba como “una herramienta importante de salud pública que ofrece a las personas más información sobre su salud, incluso sobre la posible predisposición a ciertos canceres”.
Se cree que hasta el 10 % de los cánceres se deben a cambios genéticos que se transmiten de padres a hijos. Heredar alguno de estos cambios no significa que la persona tendrá cáncer, pero aumenta la probabilidad de que ocurra.
Los médicos podrán usar los antecedentes médicos personales y familiares para identificar a las personas con un riesgo mayor de presentar cáncer. Por ejemplo, si hay varios familiares con el mismo tipo de cáncer, es posible que las personas tengan un aumento del riesgo de cáncer.
Cuando se sospecha un aumento del riesgo de formas hereditarias de cáncer en una persona, el uso de la prueba de Invitae podría confirmar la presencia o ausencia de cientos de variantes o cambios genéticos, en los 47 genes diana (genes adonde se dirige la terapia).
“Esta prueba se dirige a quienes quizás tengan un aumento del riesgo de presentar cáncer, para que entiendan mejor ese nivel de riesgo”, indicó la doctora Lori Minasian, subdirectora de la División de Prevención del Cáncer del NCI, que no participó en la elaboración de la prueba.
Si a alguien le preocupa el riesgo de cáncer por sus antecedentes familiares, debe consultar a un asesor genético, añadió la doctora Minasian. La prueba de Invitae solo se vende con receta médica.
Uso de los resultados de pruebas genéticas para orientar la atención médica
La prueba de 47 genes incluyen los genes BRCA1 y BRCA2. Hay cambios específicos en el ADN de estos genes que aumentan el riesgo de presentar formas hereditarias del cáncer de mama (seno) y cáncer de ovario, además de muchos otros tipos de cáncer.
La prueba también incluye los genes MLH1, MSH2, MSH6 y PMS2 que se vinculan con el síndrome de Lynch, una enfermedad hereditaria que aumenta el riesgo de varios tipos de cáncer. Algunas personas con síndrome de Lynch tienen cáncer colorrectal a los veintitantos años, que es una edad mucho más temprana a la edad en la que se suele comenzar la detección sistemática del cáncer colorrectal.
En las últimas décadas se crearon muchas herramientas, como las pruebas genéticas, para evaluar el riesgo de cáncer de una persona. La doctora Minasian afirmó que “esta prueba es la primera que se sometió al examen riguroso de la FDA para demostrar que es segura y eficaz para el uso previsto”.
Para validar el rendimiento de la prueba, los investigadores de Invitae analizaron más de 9000 muestras de personas que sabían que presentaban uno de los cambios genéticos incluidos en la prueba y, de acuerdo con la FDA, la precisión fue superior al 99 % para los cambios evaluados.
Según la doctora y licenciada en Medicina Wendy Rubinstein, directora científica principal de la División de Prevención del Cáncer del NCI, quienes se enteran que heredaron variantes genéticas relacionadas con el cáncer mediante las pruebas genéticas, quizás puedan tomar medidas para disminuir el riesgo de la enfermedad y para detectarla temprano.
“El propósito de este tipo de pruebas genéticas es crear oportunidades de prevención y detección temprana en las familias afectadas por cánceres hereditarios”, comentó la doctora Rubinstein, que antes fue subdirectora en la oficina de la FDA que autorizó la prueba de Invitae.
Por ejemplo, las personas con variantes hereditarias dañinas en los genes BRCA1 o BRCA2 tienen varias opciones para disminuir su riesgo de cáncer, como iniciar antes los exámenes de detección del cáncer de mama, optar por cirugía para disminuir el riesgo y usar medicamentos que disminuyan el riesgo.
Asimismo, las personas que tienen variantes genéticas hereditarias vinculadas con el síndrome de Lynch pueden hacerse el primer examen de detección del cáncer colorrectal antes de la edad recomendada en las pautas, o hacerse estos exámenes más seguido para detectar los signos tempranos del cáncer colorrectal.
Según la FDA, además de detectar variantes hereditarias en personas con riesgo de cáncer, la prueba también se podría usar para identificar variantes en personas que ya recibieron un diagnóstico de cáncer. La información sobre estas variantes podría ayudar a decidir la mejor forma de tratar la enfermedad.
Una nueva clasificación reglamentaria
La FDA anunció que creó una nueva clasificación reglamentaria para la prueba de Invitae y las futuras pruebas de genes múltiples o análisis multigénicos destinados para el mismo propósito. La FDA clasifica estas pruebas como dispositivos y, por lo tanto, la reglamentación es distinta a la de los medicamentos.
Algunos usuarios de la prueba de Invitae quizás no se den cuenta de que todavía tienen cierto riesgo de presentar cáncer aunque obtengan un resultado negativo en la prueba, advirtió la FDA. Esto se debe a que la prueba no evalúa todos los genes relacionados con un aumento del riesgo de cáncer, y son muchos los factores, además de la composición genética de una persona, que contribuyen a la formación del cáncer.
También existe la posibilidad de obtener resultados positivos falsos y resultados negativos falsos, que conllevan sus propios riesgos. Por ejemplo, alguien con un resultado positivo falso podría recibir un tratamiento innecesario para disminuir la probabilidad de un diagnóstico de cáncer.
Pero, según la FDA, en el caso de cualquier prueba autorizada conforme a esta clasificación reglamentaria, estos riesgos disminuyen por “la validación del rendimiento analítico, la validación clínica y la ficha técnica o etiquetado adecuado de esta prueba”.
Descubrir variantes nuevas que se vinculan con el cáncer
En la prueba de Invitae, se usa la secuenciación de última generación para detectar cambios en los 47 genes diana. Para interpretar los resultados de las pruebas, Invitae emplea datos probatorios de varias fuentes, como la información de estudios publicados, bases de datos públicas, programas de predicción y la base de datos interna de Invitae que contiene una selección de variantes genéticas relacionadas con el cáncer, explicó Jim McKinney, portavoz de la FDA.
“Es posible que se identifiquen nuevas variantes en las pruebas de los pacientes”, señaló McKinney, y añadió que se han identificado miles de variantes hereditarias en los genes BRCA1 y BRCA2.
La importancia clínica de algunas variantes recién identificadas tal vez no sea evidente, al menos al principio. Pero a lo largo del tiempo, los investigadores quizás obtengan más información sobre estas variantes de significado incierto y sepan si contribuyen al aumento del riesgo de cáncer hereditario.
“A medida que avanzan las investigaciones, podemos averiguar si hay alguna probabilidad de que una variante de significado incierto aumente el riesgo de cáncer”, comentó la doctora Minasian.
Destacó un estudio reciente, en el que se descubrió que algunos participantes tenían variantes de significado incierto al principio de la investigación. Pero con el tiempo, los investigadores averiguaron más sobre el riesgo de cáncer relacionado con estas variantes, y el equipo de la doctora Minasian pudo dar esta información a los participantes del estudio.
“Cuando estudiamos las posibles variantes del riesgo, recopilamos información sobre la marcha”, indicó la doctora Minasian. “Y, a medida que se acumulan más datos, a veces descubrimos qué podrían significar estas variantes para las personas que las heredan”.
Los resultados de la prueba de Invitae quizás incluyan variantes de significado incierto. Según un portavoz de Invitae, cuando una de estas variantes se reclasifica y ofrece información para tomar una decisión clínica, la compañía entrega un informe actualizado al médico que prescribió la prueba y al paciente.