Aplicación interactiva mejora los índices de exámenes de detección del cáncer colorrectal
, por Equipo del NCi
Si bien los exámenes de detección del cáncer colorrectal han demostrado que reducen las muertes por la enfermedad, solo aproximadamente dos tercios de los estadounidenses están al día con las pruebas de detección.
Ahora, un nuevo estudio indica que, al proveer a la gente una manera sencilla de ordenar sus propias pruebas de detección, esto podría aumentar el número de personas que se someten a las pruebas.
En el estudio financiado por el NCI, se entregó a las personas que esperaban ver a sus doctores para exámenes de rutina una tableta cargada con una aplicación interactiva que proporciona información acerca de la necesidad de realizarse pruebas de detección de cáncer colorrectal; esta aplicación les ayuda a tomar decisiones acerca de los exámenes de detección y les permite ordenar las pruebas correspondientes. El estudio mostró que las personas que usaron la aplicación tuvieron una doble probabilidad de hacerse las pruebas, en comparación con quienes vieron un video que no proporcionó información sobre los exámenes de detección ni sobre la opción de ordenar una prueba.
El aspecto "interesante e innovador" del enfoque utilizado en el nuevo estudio es que "una vez que los pacientes optaron por hacerse la prueba de detección, tuvieron la oportunidad de ordenar las pruebas ellos mismos", dijo la doctora Caitlin Murphy, investigadora de prestación de atención médica del Centro Médico Southwestern de la Universidad de Texas, quien no participó en el nuevo estudio.
Los hallazgos fueron publicados el 13 de marzo en la revista Annals of Internal Medicine.
El estudio clínico incluyó a quienes tienen más probabilidad de enfrentarse a obstáculos para hacerse pruebas de detección
La Brigada de Servicios Preventivos de los EE. UU. recomienda hacerse pruebas de detección de cáncer colorrectal a los adultos con riesgo promedio entre 50 y 75 años con una colonoscopia cada 10 años o una prueba de materia fecal cada año. Se recomienda que las personas con resultados anómalos en las pruebas de materia fecal (signos de sangre en la materia fecal) se sometan a una colonoscopia para investigar la causa.
Varios factores contribuyen a los índices bajos de exámenes de detección en los Estados Unidos, incluidos el temor al procedimiento o a la preparación; falta de conocimiento de la necesidad de los exámenes de detección y la falta de discusión o discusiones inadecuadas entre el doctor y el paciente acerca de los exámenes de detección. Los índices de exámenes de detección son particularmente bajos entre las personas con menos estudios o con ingresos bajos.
Los investigadores probaron diferentes enfoques para aumentar los índices de exámenes de detección de cáncer colorrectal, como pequeños incentivos económicos y cartas de invitación por correo y paquetes gratuitos para la pruebas; los resultados que obtuvieron fueron variados.
En el nuevo estudio, el doctor David P. Miller, Jr., de la Facultad de Medicina Wake Forest y sus colegas probaron la aplicación Mobile Patient Technology for Health-CRC (mPATH-CRC) en seis consultorios comunitarios de atención primaria en Carolina del Norte; la aplicación fue diseñada para personas con escasos conocimientos básicos de salud y de informática.
Se determinó que, de los 450 participantes del estudio, 37 % tenían conocimientos básicos limitados de salud y 53 % tenían ingresos anuales inferiores a $20 000. La mayoría eran blancos no hispanos (57 %) o afroamericanos (38 %). El estudio solo incluyó a personas de habla inglesa.
Los participantes tenían entre 50 y 74 años y una cita programada con el proveedor de atención primaria ya que era tiempo de hacerse la prueba de detección de cáncer colorrectal.
La aplicación mPATH-CRC informa a los pacientes sobre las dos pruebas de uso más frecuente en los Estados Unidos para detectar el cáncer colorrectal: la colonoscopía y la prueba de sangre oculta en la materia fecal, que detecta sangre escondida (oculta) en las muestras de materia fecal del paciente y ayuda a decidir cuál prueba deberá usar.
Los pacientes que aceptaron participar en el estudio debían llegar entre 45 y 60 minutos antes de la cita con el proveedor de atención primaria para usar la aplicación. Fueron asignados al azar para usar la aplicación mPATH-CRC o una aplicación de control que incluía un video sobre dieta y ejercicio y no daba a los pacientes la opción de ordenar las pruebas de detección por su cuenta.
Se notificó a los proveedores de atención primaria de los pacientes que ordenaron por su cuenta la prueba de detección con la aplicación, y se les pidió que aprobaran o rechazaran la orden de la prueba. Los pacientes que ordenaron por su cuenta la prueba de detección recibieron una serie de mensajes automáticos de seguimiento por correo electrónico o texto para animarlos a que completaran la prueba.
La aplicación mejoró los exámenes de detección, pero necesita correcciones
De los 223 participantes asignados al grupo de mPATH-CRC, 30 % completaron una prueba de detección dentro del período de seguimiento del estudio de 24 semanas, en comparación con 15 % de las 227 personas en el grupo de control.
Pero un índice de exámenes de detección de 30 % "aún está muy lejos del ideal", dijo el doctor Miller.
La doctora Murphy señaló que es importante considerar también cuántos pacientes que eligieron la prueba de materia fecal siguieron la recomendación de hacerse una colonoscopia diagnóstica si obtuvieron un resultado anómalo en la prueba de materia fecal. Si bien los del equipo del estudio no tienen datos completos sobre esto, dijo el doctor Miller, saben que al menos algunas de las personas que obtuvieron resultados anómalos en la prueba de la materia fecal se hicieron una colonoscopia.
Además, los investigadores analizaron la detección de pólipos en el colon (tumores precancerosos) y cánceres en ambos grupos. Hallaron 15 personas con pólipos y una persona con cáncer entre quienes usaron la aplicación, en comparación con solo 6 personas con pólipos en el grupo de control.
"Esto permite suponer que de cada 22 personas que usan la aplicación, encontraremos pólipos en una persona adicional, y así tenemos la posibilidad de prevenir que una persona sufra de cáncer de colon", dijo el doctor Miller.
Los investigadores se sorprendieron al encontrar que casi la mitad (53 %) de los pacientes en el grupo de mPATH-CRC ordenaron una prueba para ellos mismos por intermedio de la aplicación. El doctor Miller dijo que este fue un número más alto del esperado.
"Claramente los pacientes quieren hacerse las pruebas de detección, pero algo sucede a nivel del sistema [de atención médica] o en el lado clínico de las cosas que está impidiendo que algunos las lleven a cabo", dijo la doctora Murphy.
Para mejorar aún más los índices de detección, deberemos descubrir cómo "incorporar prácticas y cambios a nivel del sistema que permitan a los pacientes desempeñar un papel más activo en su atención médica y, también, cómo apoyar mejor a los pacientes que no completan las pruebas ordenadas", dijo el doctor Miller.
Un enfoque simple y rentable podría incluir un servicio de llamadas telefónicas realizadas por navegadores de pacientes a quienes probablemente necesiten un apoyo adicional para completar las pruebas de detección, continuó el doctor.
El equipo del doctor Miller recientemente recibió financiación del NCI para un estudio de seguimiento a realizarse con socios de la Universidad de Kentucky. Los investigadores tienen plan de estudiar el nivel de apoyo que necesitan las clínicas médicas comunitarias para poner en marcha la aplicación mPATH-CRC y mejorar los índices de exámenes de detección.
Se necesitan nuevas formas de interacción con los pacientes
"Cuando los pacientes tienen la facultad de no solamente elegir la prueba, pero también decir 'quiero ordenar la prueba', es más probable que las lleven a cabo", dijo la doctora Murphy.
En un estudio previo sobre la ayuda para la decisión realizado por el equipo del doctor Miller, no se permitió a los pacientes que ordenaran las pruebas por su cuenta; en ese estudio la ayuda para la decisión no tuvo ningún efecto en el examen de detección.
El nuevo estudio también halló que los pacientes del grupo de mPATH-CRC tenían más probabilidad de preferir la prueba de materia fecal que quienes estaban en el grupo de control.
La doctora Murphy dijo que es importante que se den opciones de pruebas de detección a los pacientes, no solo en términos de preferencias personales sino también por razones económicas, en particular para las personas que no tienen seguro médico o que les resulta difícil dejar el trabajo para hacerse una colonoscopia.
"Nuestra inclinación natural en los Estados Unidos de recomendar una colonoscopia [como examen de detección] podría ser perjudicial, porque el paciente puede pensar 'no puedo pagar una colonoscopia, por lo tanto, no voy a poder hacerme la prueba de detección', mientras que, si saben que existe una prueba de materia fecal, quizá se harían la prueba de detección", dijo el doctor Miller.
"A pesar de su éxito, este estudio perdió… oportunidades que podrían haber tenido un efecto aún más transformador", escribieron los doctores David Asch y Shivan Mehta, del Centro para la Innovación de la Atención Médica de la Universidad de Pensilvania, en un editorial sobre el nuevo estudio.
Por un lado, señalaron, animar a que se hagan las pruebas de detección de cáncer colorrectal no tiene por qué suceder en el contexto de una visita a la clínica.
"Al final, la meta no es tener más pacientes de atención primaria que se hagan la prueba de detección en la clínica, si no tener más personas que se hagan las pruebas, una meta que invita al uso de teléfonos inteligentes, redes sociales y otros elementos de la vida diaria", escribieron los doctores Asch y Mehta. "Es probable que los ingredientes activos del cambio transformador provengan de nuevas formas de hacer participar a los pacientes fuera de las visitas en consultorios y otros procesos tradicionales de atención".