Pembrolizumab prometedor en pacientes con forma rara de cáncer de piel
, por Equipo del NCI
En un estudio clínico pequeño, más de la mitad de los pacientes con una forma agresiva de cáncer de piel llamada carcinoma de células de Merkel respondieron al fármaco pembrolizumab (Keytruda®) el cual refuerza la respuesta inmunitaria contra el cáncer. En general, las respuestas han durado más tiempo de lo que se ve típicamente en pacientes con este cáncer muy poco común que han recibido quimioterapia.
Los 26 pacientes en este estudio en fase II tenían una forma avanzada de la enfermedad, y ninguno había recibido anteriormente un tratamiento sistémico. De los 25 pacientes que pudieron ser evaluados, 14 pacientes (56%) tuvieron una respuesta completa o parcial, informó el doctor Paul Nghiem, del Centro de Investigación de Cáncer Fred Hutchinson el 19 de abril en la reunión anual de la American Association for Cancer Research (AACR) en Nueva Orleans.
“Fue claro muy al principio del estudio que una fracción de pacientes respondieron realmente bien al tratamiento y, con la misma importancia, que sus respuestas parecían ser duraderas”, dijo el doctor Nghiem, quien tiene también un puesto en la University of Washington School of Medicine. “Este estudio es uno de los primeros en demostrar el concepto de que los cánceres impulsados por virus pueden responder a inmunoterapia”.
Los resultados fueron publicados simultáneamente en el New England Journal of Medicine.
“Este [estudio] es muy excitante, y estos resultados son muy significativos”, dijo el doctor Raymond N. DuBois, de la Medical University of South Carolina College of Medicine, quien facilitó una reunión de prensa sobre la investigación en la reunión de la AACR.
Casi 80% de los carcinomas de células de Merkel están asociados con infección por un virus llamado poliomavirus de células de Merkel (MCPyV). El otro factor principal de riesgo es la exposición a los rayos ultravioleta del sol, que pueden dañar las células que se encuentran en las capas superiores de la piel. Cuando surge el cáncer entre ciertas células de piel, puede tener la apariencia de células normales de Merkel, cuya función incluye regular la sensación del tacto. En comparación con el melanoma maligno, el carcinoma de células de Merkel tiende a diseminarse con más agresividad y es varias veces más probable de ser letal que el melanoma.
Ningún medicamento ha sido aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos para el tratamiento del carcinoma de células de Merkel. Algunos pacientes responden a la quimioterapia, pero la enfermedad avanza típicamente después de 3 meses, y deja a los pacientes con pocas opciones, si es que las hay.
Posibles implicaciones de otros cánceres
El pembrolizumab, el cual fue aprobado para tratar melanoma y algunos tipos de cáncer de pulmón, se dirige a una proteína llamada PD-1 que refrena la actividad del sistema inmunitario. El fármaco, uno de la clase de terapias que se conocen como inhibidores de puntos de control inmunitarios, elimina este freno en el sistema inmunitario lo que permite que algunas células inmunitarias ataquen a los tumores.
En el estudio, quienes tuvieron respuesta incluyeron a pacientes cuyos tumores tuvieron MCPyV así como pacientes cuyos tumores no tuvieron el virus. Será necesario investigar todavía más para entender los mecanismos por los que trabaja el fármaco en estos tipos diferentes de tumores, dijeron los autores del estudio.
“Este es un estudio relativamente pequeño, pero los resultados son muy prometedores”, dijo la coautora, doctora Suzanne Topalian, del Sidney Kimmel Comprehensive Cancer Center. “Y, aunque el estudio trató de una enfermedad poco común, los resultados pueden ser emblemáticos del uso de inmunoterapia para un grupo mucho más grande de cánceres—los que están asociados con infecciones virales”.
En todo el mundo, cerca del 20% de los cánceres están asociados con entes infecciosos como los virus. La infección persistente por ciertos tipos de virus del papiloma humano, por ejemplo, pueden conducir a cáncer cervical y a otros tipos de cáncer.
El estudio del carcinoma de células de Merkel presenta la cuestión de si otros virus que están asociados con el cáncer producen antígenos que estimulan el sistema inmunitario para rechazar un tumor, explicó la doctora Topalian. “Es una pregunta abierta, pero varios estudios clínicos la están investigando”.
Exploración de los próximos pasos
Los investigadores extenderán el estudio presente, y añadirán dos docenas más de pacientes. Esto podría ayudarles a entender mejor cuestiones importantes, como cuáles pacientes tienen más probabilidad de responder a la inmunoterapia y durante cuánto tiempo deberán ser tratados los pacientes después de responder.
“También necesitamos aprender a combinar este tratamiento con otras terapias para beneficiar a los pacientes que no responden a la inmunoterapia sola”, dijo el doctor Nghiem.
Los efectos secundarios de pembrolizumab fueron controlables en la mayoría de los pacientes, continuó él. Pero dos pacientes del estudio tuvieron que detener el tratamiento después de una o dos infusiones a causa de los efectos secundarios. Sin embargo, casi un año después, ambos pacientes tuvieron respuestas continuas de los tumores.
“Para esos dos individuos, el sistema inmunitario está haciendo su trabajo claramente, por lo menos ahora”, dijo el doctor Nghiem. “Esto sugiere que puede ser posible con solo atizar el sistema inmunitario—para despertarlo—y luego ver un beneficio que persiste. Esta es una idea excitante para tenerla en cuenta”.
Formación de una colaboración
El doctor Nghiem tuvo al principio dificultad para atraer a una compañía farmacéutica importante para probar una terapia basada en el sistema inmunitario para pacientes con carcinoma de células de Merkel porque la enfermedad es tan rara—aproximadamente 2000 casos son diagnosticados cada año en los Estados Unidos.
Eventualmente, el apoyo del Programa de Evaluación de Terapias de Cáncer (CTEP) del NCI y la Red de Estudios de Inmunoterapia para Cáncer permitió a los investigadores preparar el estudio clínico en colaboración con Merck, el fabricante del fármaco, y múltiples sitios clínicos.
“Este estudio es un buen ejemplo de cómo el NCI puede trabajar en colaboración con la academia y la industria para llevar una importante terapia nueva a una población de pacientes con un cáncer muy raro”, dijo el doctor Elad Sharon, de CTEP y coautor del estudio.
Para el doctor Nghiem, los nuevos descubrimientos han extendido las opciones de tratamiento para pacientes que las necesitan. “Como médico, he dicho a muchos pacientes con esta enfermedad que ya no teníamos qué ofrecerles”, dijo él. “Es excitante en verdad poder darles ahora más opciones”.