Problemas en la boca y la garganta durante el tratamiento del cáncer
¿Qué causa problemas en la boca y la garganta?
Los tratamientos del cáncer pueden causar problemas en la boca, la garganta y los dientes. La radioterapia en la cabeza y el cuello puede dañar las glándulas salivales y tejidos de la boca, o hacer difícil masticar y tragar alimentos de forma segura. Algunos tipos de quimioterapia e inmunoterapia también dañan las células de la boca, la garganta y los labios. Los medicamentos que se usan para tratar el cáncer y ciertas afecciones de los huesos también pueden causar problemas en la boca.
¿Qué problemas se pueden presentar en la boca y la garganta?
Los problemas en la boca y la garganta a veces son los siguientes:
- cambios en el sentido del gusto (disgeusia) o en el sentido del olfato
- sequedad en la boca (xerostomía)
- infecciones y llagas en la boca
- dolor o hinchazón en la boca (mucositis oral)
- sensibilidad a los alimentos fríos o calientes
- dificultad para tragar (disfagia)
- caries dentales
¿Cuándo se consideran graves los problemas en la boca?
Los problemas en la boca (también llamados problemas orales) son más graves si interfieren en la alimentación y el consumo de bebidas porque pueden provocar deshidratación o desnutrición. Es importante que llame al médico o al personal de enfermería si le duele la boca, los labios o la garganta y se le hace difícil comer, beber o dormir, o si tiene fiebre de 100.5 °F (38 °C) o más alta.
Cómo prevenir los problemas de la boca y los dientes
Su médico o enfermero le puede aconsejar que siga estas y otras indicaciones:
- Hágase una revisación dental antes de empezar el tratamiento. Antes de que comience el tratamiento, vaya al dentista para que le haga una limpieza y una revisación dental. Informe al dentista sobre su tratamiento del cáncer y trate de que le termine cualquier trabajo dental antes de que inicie el tratamiento del cáncer.
- Revise y limpie la boca todos los días. Revise la boca todos los días para ver si tiene llagas o manchas blancas. Informe a su médico o enfermero tan pronto observe algún cambio, como dolor o sensibilidad. Enjuague la boca durante el día con una solución de agua tibia, bicarbonato de sodio y sal. Pida a su enfermero que anote la receta del enjuague bucal que le recomienda. Cepille sus dientes, encías y lengua con suavidad después de cada comida y antes de acostarse en la noche. Use un cepillo de dientes muy suave o hisopos de algodón. Si tiene riesgo de sangrado, pregunte si debe usar hilo dental.
Formas de tratar los problemas en la boca y los cambios en el sentido del gusto
Su equipo de atención médica le puede dar estas y otras indicaciones para tratar los siguientes problemas:
- Dolor de boca o garganta: Elija alimentos suaves, húmedos y fáciles de tragar. Suavice los alimentos secos con distintos tipos de salsa u otros líquidos. Use una licuadora para preparar batidos o mezclar alimentos para que sean más fáciles de tragar. Pregunte sobre analgésicos (medicamentos para el dolor), como pastillas para chupar o aerosoles, que adormecen la boca y hacen que comer sea menos doloroso. Evite alimentos y bebidas que puedan irritar la boca: alimentos crujientes, salados, condimentados o azucarados, y bebidas alcohólicas. No fume ni consuma otros productos de tabaco.
- Sequedad en la boca: Tome mucho líquido porque la boca seca aumenta el riesgo de caries dentales e infecciones bucales. Tenga agua a la mano y beba sorbos con frecuencia para mantener la boca húmeda. Chupe trocitos de hielo o caramelos sin azúcar, coma postres helados o mastique goma de mascar (chicle) sin azúcar. Póngase protector labial (crema de cacao). Pregunte sobre medicamentos, como los sustitutos de la saliva, que cubren, protegen y humectan la boca y la garganta. La acupuntura también puede ayudar con la sequedad en la boca.
- Cambios en el sentido del gusto: Es posible que los alimentos no le sepan a nada, que tengan un sabor diferente al que solían tener o que casi no tengan sabor. La radioterapia puede causar cambios en los sabores dulce, agrio, amargo y salado. Los medicamentos de quimioterapia pueden causarle un sabor metálico desagradable. Si tiene cambios en el sentido del gusto, lo mejor es probar diferentes alimentos para encontrar los que le sepan mejor. Probar alimentos fríos también le puede ayudar. Los siguientes son otros consejos para tener en cuenta:
- Si la comida le sabe insípida, aderécela para mejorar su sabor o añada especias.
- Si la carne roja tiene un sabor extraño, cambie a otros alimentos ricos en proteína, como pollo, huevos, pescado, mantequilla de maní, pavo, frijoles o productos lácteos.
- Si la comida le sabe salada, amarga o ácida, trate de endulzarla.
- Si la comida tiene un sabor metálico, cambie a utensilios de plástico y recipientes de cocina que no sean de metal.
- Si tiene mal sabor en la boca, pruebe caramelos de limón sin azúcar, goma de mascar (chicles) o pastillas de menta.
Hable con su equipo de atención médica sobre los problemas en la boca y la garganta
Haga una lista de preguntas antes de la visita médica. Estos son ejemplos de preguntas para añadir a su lista:
- ¿Cuándo comienzan estos problemas? ¿Cuánto duran?
- ¿Qué puedo hacer para sentirme mejor?
- ¿Qué medicamentos ayudan?
- ¿Qué síntomas o problemas debo comunicarle al médico?
- ¿Qué analgésicos o enjuagues bucales me pueden ayudar?
- ¿Me recomendaría ir a un nutricionista para que me indique buenas opciones de alimentos?
- Para personas que reciben radioterapia en la cabeza y el cuello: ¿Debo tomar suplementos alimentarios como el zinc para recuperar el sentido del gusto después del tratamiento?